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viernes, 1 de agosto de 2025

López Miras y los sapos ultras

 

El miércoles 30 de julio entró en vigor en la Región de Murcia la ley 2/2025 de participación institucional, que modifica la de 2017. Se suprimen las subvenciones a los sindicatos y organizaciones empresariales. Es otro sapo ultra que se ha tragado el Gobierno de Fernando López Miras (PP) para sacar los presupuestos de 2025 con la abstención (ojo, abstención, ni siquiera el voto afirmativo) de Vox.

La exposición de motivos es una vergüenza legislativa por incoherente, contradictoria y tramposa, muy apropiada, sí, para una ley cínica escrita por caraduras.

En la primera parte resume lo que la Constitución reconoce a las organizaciones sindicales y empresariales, “uno de los pilares básicos de nuestro Estado social y democrático de derecho”, y cita el artículo que “consagra su papel como organizaciones básicas para la defensa y promoción de los intereses económicos y sociales”. No citarás la Constitución en vano, salvo que seas un cínico.

Los apartados II y III se convierten en dos charcos en los que saltan los sapos ultras. Se vuelca toda la ideología de la extrema derecha. Se trasladan al boletín oficial de la Región de Murcia los eslóganes que Vox repite constantemente, que muestran su antisindicalismo y su falta de reconocimiento de las organizaciones que tienen una representación reconocida en elecciones sindicales con todos los avales legales y administrativos (la representación empresarial a través de la CEOE va de otra manera, pero eso es otro tema). Es decir, contradice la Constitución porque rechaza lo más básico, la representación democrática de las trabajadoras y trabajadores. En palabras de Vox, que ahora son palabras del Gobierno regional y del boletín oficial: “el monopolio sindical subvencionado que las distintas Administraciones han promovido hasta ahora”. El único ejemplo de monopolio sindical lo encontraremos en el Sindicato Vertical franquista. Tanto mencionar la Constitución para acabar descalificándola como franquista, esa cosa que tanto aprecio les merece a los ultras.

A las compensaciones por asistir -y contribuir- a los órganos de representación institucional se les llama “prerrogativas”, es decir, privilegios. No se discuten las de sus señorías parlamentarias ni las de las consejeras o consejeros. Nos encontraremos, pues, con que en cualquiera de esos órganos institucionales haya una parte con “prerrogativas” y otra parte que acuda “a título gratuito”.

Con esta medida “se pretende contribuir a un gran ahorro presupuestario”, que se destinará “a otras áreas prioritarias como sanidad, educación o infraestructuras”. Teresa Fuentes, secretaria general de CC OO Región de Murcia, lo cuantifica en un 0,014% del presupuesto. Lo que repartido entre tres nos da un aumento en esas partidas de 0,0046%. Un suspiro de alivio habrá recorrido los pasillos de hospitales y centros de salud, de colegios, institutos y universidades. Y en lo que resta de 2025 el presidente López Miras colocará muchas primeras piedras de otras tantas infraestructuras muy necesarias para la región. Las segundas piedras ya si eso lo vamos viendo.

El sapo caradura de la charca croa que con esta ley “se ahonda en una mayor transparencia y control del dinero público, ya que obligaría a las organizaciones a financiarse con recursos propios o mediante mecanismos más transparentes, reduciendo el riesgo de uso indebido de fondos públicos”. Lo de financiarse con recursos propios está muy bien, ¿pero nada más que sindicatos y patronal? ¿No vale para todas las asociaciones a las que se subvenciona con dinero público? ¿No vale para los partidos políticos? Y hablando de transparencia, Vox acaba de ser multado por tercera vez por el Tribunal de Cuentas por financiación irregular. En total, Vox suma ya más de un millón de euros en multas.

El sistema de representación sindical en España se reconoce por las elecciones sindicales. Habrá que repetirlo y repetirlo después de casi 50 años. Los delegados y delegadas sindicales elegidos, empresa a empresa, representan a todos, no solo a quienes estén afiliados. Por eso, los acuerdos que llegan con las patronales y las administraciones públicas benefician al conjunto. En España no existen los acuerdos de eficacia limitada, es decir, aquellos que solo afectan a la afiliación del sindicato o sindicatos que los hayan firmado.

A pesar de ello, en las charcas ultras de la exposición de motivos de esta ley se croa que “Para ejercer una verdadera representación de los trabajadores es necesario que los interlocutores sociales se financien a través de las cuotas de sus propios afiliados”.

Un dato más. Según el portal de transparencia que se puede consultar en la página web del sindicato, CC OO tiene 1.088.772 personas afiliadas (cualquier comparación con partidos políticos o asociaciones diversas subvencionados sería odiosa). Se financia con un 83,82 de ingresos propios (cuotas de la afiliación). Recibe un 5,19% de subvenciones públicas y un 10,99% de programas finalistas.  

Tanta palabrería incoherente, contradictoria y tramposa para acabar resolviendo la ley, por decirlo en el lenguaje abobado propio de los eslóganes que la inspiran, que se les quitan las subvenciones a sindicatos y patronal. El TSJ de Castilla y León ya falló contra una medida similar. Quizá López Miras tenga que tragarse otro sapo, aunque esta vez no fuera ultra.

miércoles, 5 de junio de 2019

Trastorno


El secretario general de Ciudadanos exige a los dirigentes socialistas que quieran pactar con ellos que abjuren del sanchismo y que se comprometan, por escrito, a aplicar el artículo 155 de la Constitución en Cataluña. La Ejecutiva de Ciudadanos acordó “por unanimidad” excluir a Vox de cualquier negociación para formar gobiernos en ayuntamientos y comunidades autónomas. Intentarán llegar a acuerdos de forma preferente con el PP y “excepcionalmente” con el PSOE. Al Gobierno de la Junta de Andalucía, en el que Ciudadanos tiene cinco consejerías, incluida la vicepresidencia, lo apoyan PP, Ciudadanos y Vox. Ciudadanos niega que exista un acuerdo suyo con Vox, porque su alianza es con el PP y es el PP el que ha llegado a un arreglo con Vox.

-¿Cómo decía la canción…?
-Los amigos de mis amigas son mis amigos…

Don Quijote aconseja al caballero pobre que sea “cortés y comedido”, “no soberbio, no arrogante”. Virtudes que convienen al político en general. El peor PP de la historia sacó a Ciudadanos más de 200.000 votos en las generales. Un mes después, en las europeas, fueron 1.783.551 (Ciudadanos perdió 1.409.958 votos). Albert Rivera se dio un golpe en la cabeza el día que vio a Pedro Sánchez entrar en la Moncloa y todavía no se ha recuperado. Había confundido el BOE con los boletines de las casas de apuestas, perdón, de las empresas demoscópicas y ya preparaba la chaqueta de presidente para la foto en la escalinata de la Moncloa. Transmite su aturdimiento postraumático en esas exigencias para apoyar al PP o al PSOE, que recuerdan los discursos barrocos recargados de antítesis y logorrea. Tras las elecciones de abril y mayo su partido no es puerta principal sino bisagra. Pasar de jinete de caballo ganador en el hipódromo a mamporrero en las cuadras trastorna a cualquiera.