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“Catar invertirá 300 millones de euros para capitalizar cajas de ahorros españolas”, ha anunciado el primer ministro del emirato, jeque Hamad bin Jassim bin Jaber bin Muhammad al Thani. En rueda de prensa conjunta, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha destacado que el compromiso de Catar de invertir fondos soberanos supone un mensaje importante de “confianza en la economía española”.

Zapatero visitó también los Emiratos Árabes Unidos (EAU). A su llegada, el príncipe heredero de Abu Dhabi, jeque Mohamed bin Zayed al Nahyan, le ofreció una cena. Emiratos promete oportunidades para las empresas españolas en el sector de las infraestructuras.  El presidente del país,  emir Jalifa bin Zayed al Nahayan, visitará España en octubre de 2011.

-¿No anda por ahí la cosa un poco revuelta?

-Sí, bueno, quizás… Recabamos información, que diría Trinidad Jiménez…

El jefe del Estado español, rey Juan Carlos de Borbón y Borbón, visitó Kuwait invitado a los actos del quincuagésimo aniversario de la independencia del país. También se celebraba el vigésimo aniversario de “su liberación por parte de la coalición internacional que expulsó a las tropas de Sadam Husein”. Kuwait presume de ser una monarquía parlamentaria, que elige al poder legislativo (el Ejecutivo queda en manos de la familia real). Las mujeres pueden votar desde 2006. En los Emiratos no hay ni elecciones ni partidos políticos, y las huelgas están prohibidas. Human Rights Watch ha denunciado la semiesclavitud que padecen los inmigrantes. Con la ola del cambio arrastrando podredumbres en el mundo árabe, el jefe del Ejecutivo busca el dinero eaucatarí y el jefe del Estado participa en las fiestas kuwaitíes. Después del amigo chino, los amigos del golfo. Las políticas exteriores de la UE y de España coinciden. ¿Para qué preocuparse por la ola si se puede caminar por la arenita?